En esta boda pasaron muchas cosas y todas buenas… incluso el repentino chaparrón al final de la ceremonia, celebrada en El Mirador, Benigànim, bendita carpa. Mucha emoción con total complicidad y colaboración de todos y cada uno de los asistentes, sinceramente una boda muy divertida e intensa. Para terminar con música en directo con Carles y su banda, amigos y familiares… y todo aquel que quiso. Gracias pareja por regalarnos este día. Un fuerte abrazo.
Tomás Badía